Tenía un tumor en el pie que no la dejaba caminar
Antonia: “Empecé a participar de la reunión de los Casos Imposibles porque tenía un tumor en la planta del pie izquierdo, no podía pisar bien y lloraba del dolor. Fui al médico, me hizo estudios y me dijo que tenía que operarme. Yo no quería, porque no sabía cómo iba a resultar todo. Pasé durante cuatro sábados por el camino de la sal y el tumor desapareció. Dejé de renguear, puedo caminar normalmente y no hizo falta que me operaran, ahora puedo pisar”.
Pudo pagar una deuda que era imposible de saldar
Tener una deuda y no poder pagarla es una situación angustiante para cualquier persona. Ester estaba viviendo ese problema y no sabía cómo resolverlo. “Tenía una deuda que para mí era imposible de pagar, de alrededor de 12 mil dólares. No sabía cómo hacer, me llamaban por teléfono todos los días porque querían cobrar y no podía darle una respuesta concreta al acreedor. Empecé a participar de la Reunión de los Casos Imposibles y gracias a Dios pude pagar la deuda, ya estoy libre de ese problema”.
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