En el comienzo de la novela Moisés y Los Diez Mandamientos, Miriam ya tuvo un papel decisivo para que su hermano Moisés, aún bebé, fuera salvo de las aguas del río Nilo. Después, ella mantuvo por mucho tiempo una posición de mando en su casa, al lado de su madre Jocabed (Denise Del Vecchio). La fe y el coraje de Miriam siempre estuvieron en escena. Pero, en los últimos capítulos, la trama le trajo nuevas situaciones al personaje, interpretado por Larissa Maciel.
En el campamento, ella tuvo que aprender a lidiar con la presencia de Séfora (Gisele Itié) y se acercó a Hur (Floriano Peixoto), con quién terminó casándose. Las novedades ayudaron a revelar facetas del personaje hasta entonces desconocidas por el público.
Los celos que ella sintió de su cuñada produjeron escenas importantes. Después, el personaje desobedeció a Dios y cuestionó el liderazgo de Moisés (Guilherme Winter), siendo castigada con la temida lepra. Aislada en una caverna, la hebrea es cuidada por Séfora. En una entrevista exclusiva, Larissa cuenta que las secuencias de Miriam enferma fueron las “más desafiantes”.
Mirian es curada
Durante el período alejada del campamento, Mirian se arrepintió de haber maltratado a su cuñada y le pidió perdón. Ella también repensó sus actitudes hacia su hermano Moisés y hacia Hur. Después de eso, Miriam fue envuelta por una luz y fue curada. La actriz dice creer en el poder del perdón y del arrepentimiento. “Si el arrepentimiento fuere genuino y genera un cambio de actitud, la persona puede transformar su vida. Estamos en esta vida para mejorar y para aprender.”
Larissa confiesa que se sorprendió por la reacción de parte del público a los cambios del personaje. “Me impresionó la rapidez con que las personas pasaron del amor al odio con respecto a ella. Incluso porque ella no hizo ninguna maldad, solo sintió envidia, celos, cosas que le hicieron más mal a ella misma que a cualquier otra persona. Y, aun así, una parte del público rápidamente la juzgó culpable”, opina.
La actriz hace un balance positivo de su participación en la novela. “¡Fue maravilloso! Fue un trabajo hecho con mucho amor por todos los involucrados”, concluye.
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