Florencia González nos cuenta lo que experimentó al visitar este Santo Lugar en compañía de su esposo: “Mi experiencia en el Templo de Salomón fue muy linda. Desde que se inauguró el Templo de Salomón con mi esposo tuvimos el deseo de conocerlo. Unos meses después, en enero del 2015, tuvimos la oportunidad de estar allí.
Ya a unas cuadras se podía ver la grandeza de esa construcción imponente, caminamos esas cuadras con alegría, no podíamos creer que estábamos ahí. Cuando entramos al Templo de Salomón me maravilló la santidad del lugar, noté la paz que había, el cuidado en cada detalle. Nos sentamos a esperar que comience la reunión, en silencio observé a mi alrededor, recordé todos los momentos difíciles que viví y supe que todo valió la pena para que hoy esté en la presencia de Dios.
Salimos renovados espiritualmente y sin dudas vamos a volver. El Templo de Salomón superó nuestras expectativas, fue un sueño cumplido. Recomiendo que lo visiten, es una experiencia extraordinaria”.
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