“Era algo imposible”
Carolina: “Tenía células inflamatorias en las retinas, que no me dejaban ver bien.Hace poco empecé el Ayuno Colectivo. Al participar desaparecieron, algo imposible para la medicina. Fui curada gracias a Dios. Ya no necesito lentes para leer. Con Jesús Podemos lograr cualquier cosa”.
“Gané el juicio”
Ester: “Se destrabó la venta de la casa de mis padres. No encontraban los documentos; pero ayunando y orando a la madrugada, lo logré. Ahora estoy luchando por un juicio que tengo. Durante 10 años me habían sacado dinero de la pensión. Ya gané el juicio y sé que me lo van a pagar”.
“Mi hijo no tenía trabajo”
Carmen: “En el Ayuno Colectivo, pude vender mi camioneta en dólares. Además, mi hijo estaba sin trabajo y consiguió uno. Por otro lado, hacía 20 años que le pedía al abogado la declatoria de heredero para mi casa. Firmaron todos mis hermanos y ahora la puedo vender y comprarme una acá”.
“Tenía un tumor”
“Llegué en enero porque me diagnosticaron un tumor en el pulmón. Había fumado 20 años. Estuve deprimida, me sentí morir.
Cuando llegué, desafié a Dios. Dije ‘en tres meses tengo que estar curada’ y así fue. Pasó ese tiempo y me confirmaron que desapareció por completo”.
Participe del Ayuno Colectivo todos los sábados a las 7, 9, 15 y 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
Si usted quiere comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al (011) 5252-4070.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico,como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.