Sepa lo que eso tiene que ver con su vida económica
El poder sobrenatural de la fe es algo extraordinario. No hay límites, puede traer todo a la existencia. Por otro lado, si no se usa correctamente, por más que la persona frecuente la iglesia, su vida no reflejará las grandezas del Altísimo.
Podemos observar esas dos realidades en Abraham y Lot. Conocé la diferencia:
1.° Por no tener una fe de calidad, Lot tomaba decisiones equivocadas, basadas en lo que veía, en sus sentidos y no en la dirección de Dios. Esto se ve cuando prefirió las praderas del Jordán al apartarse de su tío Abram, leé Génesis 13:7-11.
El Creador no logra hablar con esa clase de persona, por eso habla a través de otros. Claro que Su voluntad es hablar directamente con ella, sin embargo, si esa persona no Lo obedecerá, Él no pierde el tiempo. La fe de Lot se deja llevar por lo que ve, pero la de Abraham pide la dirección del Altísimo antes de actuar.
2.° La fe abrahámica está lista para ganar o perder. Ella confía en el Señor, por más caótico que sea el escenario, porque sabe que Él está cuidando de todo.
La obediencia a la dirección de Dios genera seguridad, aprendés a descansar en Él y no te preocupás por las circunstancias, pero, cuando no creés, vivís inquieto, perturbado y ansioso.
3.° Lot estaba apegado a las cosas materiales, lo que representa una fe que no quiere una relación con Dios, solo busca lo que Él puede dar.
Son personas que nunca se entregan, saben la verdad, pero no la obedecen. No obstante, Abraham sabía que, mientras mantuviera su objetivo en el Reino del Padre, Él cuidaría del resto. Por lo tanto, no importa quién se apartó de vos o el tamaño de tus luchas. Si estás de manos tomadas con Él, tu vida nunca más será la misma. Incluso lo que sería perjuicio se volverá una bendición.
Aprendé más:
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También podés participar en la Universal más cercana a tu domicilio, a las 8, 10, 12, 16 y, principalmente, a las 20 h.