Cuando Bruno llegó a los Casos Imposibles, prácti-camente no podía caminar: “Caminaba diez metros, me cansaba y tenía que parar. Después de la oración me siento bien, no me duele nada”.
Amanda: “Vine adolori-da, me prestaron un bastón porque pierdo el equilibrio hacia un costado. Además me dolía la rodilla y la parte lumbar. Ahora, los dolores se fueron y puedo caminar sin apoyo”.
Soledad tocó el Manto de los Imposibles y recibió lo que necesitaba: “Hace una semana que sufría un dolor en la espalda. Luego de la oración que me hicieron se me pasó, no tengo nada, estoy libre”.
Lidia: “Sufría dolores de cabeza, problemas en el estómago y en el hígado. Me hicieron la oración, to-qué el Manto y se me fue el malestar y la hinchazón. Es-toy bien, valió la pena par-ticipar”.
Participe de la reunión de los Casos Imposibles. Sábado a las 7, 9, 15 y 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
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La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico,como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.