“No sabía pedirle ayuda a Dios”
Oscar llegó a la reunión de los martes sin poder caminar y con mucho dolor. La impotencia de no poder moverse normalmente lo angustiaba: “Tengo una fa-milia, cuatro hijos grandes, ya casados. Pero no sé por qué, tuve cuatro ACVs, luché pero ya no tengo fuerzas.
No puedo caminar, ni mover un brazo, tampoco trabajar. No aguanto el dolor. Nunca aprendí a pedirle nada a Dios, a pesar de que conocía la iglesia tradicional”.
Pero después de la oración, Dios hizo un milagro y él no pudo contener las lágrimas de alegría: “Me siento mejor, no podía estar parado. Hacía cinco años que no lograba caminar bien y ahora puedo hacerlo”.
“El cáncer no me dejaba comer”
Cuando Mario llegó a la reunión de sanidad, los médicos ya no podían hacer nada por él. Sin embargo, no se rindió, usó la fe y Dios mostró Su poder: “Vine el martes pasado con cáncer de esófago, estómago e hígado. Hacía un año y días que lo estaba combatiendo pero los médicos me desahuciaron.
Ellos me dijeron que no había más remedio, ni tratamiento, que lo único que podían darme era la sonda alimentaria para que sobreviva lo más que pueda. No podía comer nada, ni siquiera líquidos. En la semana hice la prueba de tomar, logré ingerir tres tragos de agua y después de siete meses pude comer”.
Martes a las 8, 10, 16 y principalmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más próxima a su casa.
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