“Mi hijo sufría insomnio”
María: “Mi hijo recién podía dormir a partir de las cinco o seis de la mañana, sufría insomnio. Como debía levantarse temprano, tenía ataques de nervios y se ponía agresivo. Durante una semana, coloqué el Lienzo debajo de su almohada. Después lo dejé en el Altar y determiné que el trastorno desaparecería. Desde el martes pasado dejó de estar agresivo y se está levantando más temprano”.
“Use más de 30 años el inhalador”
Adrián Gustavo: “Es el quinto martes que vengo a la reunión. Por más de 30 años dependí del inhalador. Empecé a usarlo a los 17 y tengo casi 48. Usaba el más fuerte. Últimamente me hacía tres o cuatro aplicaciones, dos o tres veces por día. Hasta que pasé por el Pasillo de los 70 y usé el Lienzo Consagrado. Determiné que ya no lo iba a necesitar y ahora puedo respirar bien, estoy perfecto”.
“Vomitaba todo lo que comía”
Priscila y su madre: “Mi hija estaba mal, con mucha fiebre, dolor de estómago y se la veía extraña. Vomitaba todo lo que comía, lo hacía aunque no tuviera nada en el estómago. La doctora me dijo que se le iba a pasar, que le dé pastillas, pero también las vomitó y sus ojos se notaban raros”.
Finalmente, Priscila participó de la reunión y fue sanada inmediatamente: “Me siento bien, ya no tengo vómitos”.
Martes a las 8, 10, 16 y principalmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070 – Almagro o en la Universal más próxima a su casa.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico, como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.
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