Durante la concentración de fe, los presentes, aprendieron sobre la eficacia del sacrificio perfecto
El obispo Edir Macedo realizó la reunión del Encuentro con Dios, en el Cenáculo del Espíritu Santo de Lisboa, Portugal; allí enseñó a los presentes la importancia de realizar sacrificios a Dios.
“El sacrificio lleva a las personas a tener conciencia de que la fe que funciona, de la fe que produce efecto; ya que la fe religiosa, la que lleva a frecuentar la iglesia, a orar, a ayunar es importante, pero lo que realmente trae resultado es el sacrificio”, destacó.
El obispo continuó explicando que muchos desean ser atendidos por Dios, pero una vida completa sólo será posible a través de una entrega total al Señor Jesucristo. “Jesús desea cambiar su vida totalmente, Él quiere transformarlo en una nueva criatura, pero solo depende de usted. Al entregarse para Él hará un gran sacrificio, ya que renunciara a sí mismo para hacer la voluntad de Jesús.
Pues quien conquista una vida estable económicamente, así como el éxito material, perderá; porque todo lo que conquistamos en este mundo un día lo perderemos porque nada es para siempre, a no ser la vida eterna, así lo enseña la Palabra de Dios “El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.” (Mateo 10.39)
Continuando sobre el tema del sacrificio, el obispo citó específicamente el casamiento, como un ejemplo de renuncia pues el éxito de la unión solo es posible cuando ambos ceden su propia voluntad, en pos de la persona amada. “El principio del matrimonio es un sacrificio porque, a pesar de la fiesta, cada uno renuncia a la vida de libertad para entregarse a otra persona. El matrimonio comienza y continua en el sacrificio hasta la muerte”, concluyó.
IURD Portugal