Como ocurre con cualquier entorno complejo, para que la PC funcione correctamente se requiere un mantenimiento preventivo cada cierto tiempo.
Comienzo acelerado
Al encender el botón de arranque, la máquina pasa por un proceso de carga mediante la cual, se guardan en memoria diversas partes del sistema operativo, programas instalados y otros servicios. El problema es que los fabricantes de software, configuran sus aplicaciones para que permanezcan abiertas en segundo plano, para que al hacer clic se abran más rápido. Esto resulta conveniente para los programas que se usan todos los días. Pero los que se ejecutan esporádicamente desperdician memoria. La limpieza y desactivación de estos excedentes es un procedimiento para incrementar la velocidad. El Startup Delayer (www.r2.com.au) sirve para bloquear los que no se requieren y retrasa los que no son tan primordiales.
Papelera
Los archivos eliminados van a parar a la Papelera de reciclaje y quedan ahí. Y si a este “basurero virtual” no se lo vacía a menudo, se colapsa, y puede consumir recursos como espacio en disco y memoria RAM. El CCleaner (www.piriform.com/ccleaner) barre con todas las impurezas.
Mantener lo imprescindible
Si el sistema tambalea, es fundamental eliminar los programas instalados en forma reciente y dejar sólo aquellos que interesan. Muchas veces, el conflicto se produce con algunas versiones de prueba que se vencen o aquellas que se intenta emparchar con un crack. Existen varios métodos de borrado. Uno de las más eficaces es el soft MyUninstaller (www.nirsoft.net/utils/myuninst.html ) que es rápido y eficaz.
Escaneo a fondo
Para descartar que el desperfecto esté relacionado con un ataque de virus, nada mejor que una revisión. Microsoft Security Essentials, AVG o Avast, son algunos antivirus gratuitos que permiten buscar en el sistema malware de todo tipo.
Desfragmentación de discos
Con el tiempo de uso, los archivos y las aplicaciones se parten en fragmentos y se dispersan por el disco. Cuando el sistema necesita volver a reunirlos, esta labor le insume demasiado tiempo. El desfragmentador se ocupa de organizar los datos para que el disco funcione de manera más armoniosa. Todos los Windows incluyen una de estas herramientas. Como alternativa, se puede probar el Auslogics Disk Defrag, que también es gratuito.
Bajo registro
Los parámetros que precisa Windows para ejecutarse, el conjunto de programas instalados en la máquina y todas las actividades del sistema, se guardan en un archivo llamado Registro. Las entradas inválidas (soft mal instalado o mal borrado, error de configuración) dificultan el correcto funcionamiento del sistema operativo, lo que provoca un carga rezagada o carteles de advertencia. Hay algunos programas que se ocupan de purificar el registro. Uno de los softwares más fiables es el Argente Registry Cleaner (http://argentesoftware.blogspot.com) que busca entradas no válidas y proporciona una lista de los errores encontrados para repararlos con un clic.
Con el tiempo de uso, los archivos y las aplicaciones se parten en fragmentos y se dispersan por el disco. Cuando el sistema necesita volver a reunirlos, esta labor le insume demasiado tiempo. El desfragmentador se ocupa de organizar los datos para que el disco funcione de manera más armoniosa. Todos los Windows incluyen una de estas herramientas. Como alternativa, se puede probar el Auslogics Disk Defrag, que también es gratuito.