El evento ministrado por el obispo Renato Cardoso, en Sudáfrica, reúne a 30 mil personas
Más de 30 mil personas estuvieron presentes en el evento “Todas las respuestas”, de la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD), en la Ciudad del Cabo, la segunda más grande de Sudáfrica. El domingo 20 de mayo, el obispo Renato Cardoso, en visita especial al país ministró la gran reunión a cielo abierto.
Durante el encuentro de fe, el obispo Renato explicó que Dios quiere formar una sociedad con el ser humano. Eso implica trabajar codo a codo con Él, y no cargar el fardo que el Señor Jesús ya llevó sobre sí. Luego el obispo realizó una oración especial por la liberación de los presentes que sufrían con enfermedades y vicios. Además explicó como conseguir la transformación de la familia por medio del comportamiento y buenos ejemplos dentro de casa.
Pasos para la prosperidad
Siguiendo el propósito de la reunión, de conceder todas las respuestas a los que sufren, usando la fe sobrenatural, el obispo aclaró que el primer paso para la prosperidad es reconocer la importancia de ser fiel a Dios, en los diezmos y ofrendas. “El segundo es marcar una meta de vida próspera, un objetivo para transformarlo en realidad”, aconsejó.
Eternidad
El tema de la salvación del alma también fue abordado por el obispo, explicando que no sirve de nada conquistar riquezas en este mundo si no se cuida la propia alma, como enseña Jesús en el libro de Lucas 9:25.
“Su salvación depende de entregar su alma a Dios, lo que significa que usted necesita obedecer la Palabra de Dios, formando así una sociedad eterna con el creador. Todo lo que se necesita es decidirse a hacer lo correcto por Él. Dios es el único que venció la muerte y tiene poder para salvar su alma. El quiere una sociedad con usted, pero usted tiene que estar dispuesto también a hacer su parte”, concluyó el obispo Renato.
“No escuchaba con el oído derecho”
Khoni Tiwane estuvo presente en la gran reunión y fue bendecida con un milagro. Por más de 36 años sufrió con un problema de audición, no escuchaba con el oído derecho, tenía dificultades para comunicarse y muchas veces sufrió con crisis de vértigo y zumbidos. Después de recibir la oración de liberación fue curada y ahora escucha bien con ambos oídos gracias al poder de Dios.