El obispo Macedo explica cual es la diferencia entre el que sirve a Dios y el que no lo sirve
“Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.”, (Malaquías 3:18).
Basado en esta palabra el obispo Macedo habló a todos los internautas de la IURD TV y oyentes de Red Aleluya, el último lunes (2), al respecto de la fidelidad a Dios. “Quienes son fieles a Dios en sus diezmos tienen que tener una vida bendecida. Quien lo revela es el Espíritu Santo. Nosotros estamos en la Campaña del Monte Moriah, pero el foco principal en este momento es la consagración de diezmistas. Cuando hablamos del Monte Moriah, el monte del sacrificio, estamos hablando de grandes conquistas, de cosas que humanamente son imposibles”, dice el obispo.
Destacó el ejemplo dejado por Abraham: “Cuando somos fieles en el diezmo para con Dios, al igual que el mismo Abraham, estamos volviéndonos la propia bendición. Abraham dio el diezmo, él era diezmista antes de la ley de Moisés dada por Dios en el Monte Sinaí. Cuando somos fieles, cuando cumplimos nuestra parte delate de Dios, pasamos a tener derechos y privilegios al punto de exigirle el cumplimiento de Sus promesas.”
“Mirad a Abraham vuestro padre, y a Sara que os dio a luz; porque cuando no era más que uno solo lo llamé, y lo bendije y lo multipliqué.”, (Isaías 51:2).
El obispo agregó: “Bendecir quiere decir multiplicar, por eso, no se olvide de que el domingo es el día de exigirle a Dios. Nosotros vamos a reclamarle a Dios lo que Él ha prometido en Su Palabra. En este domingo, no vaya para una consagración más, y sí para exigirle a Dios la diferencia entre su vida y la vida de los que no sirven a Dios. En esta oportunidad, yo pido que todos se preparen para ese momento: no hable nada con nadie, ni salude a las personas, usted permanecerá callado, y solo hablará en el momento del clamor por la transformación total y completa de su vida. Entonces, usted verá la diferencia a la que Dios se refiere, y tenemos que verla aquí abajo, en la Tierra, porque allá en los cielos no habrá malos.
La Consagración de los diezmistas será el domingo 8 en todas las Iglesias Universal del Reino de Dios. Busque el Cenáculo del Espíritu Santo más cercano.