“Yo era candidata a obrera, pero conocí a un muchacho, fui a vivir con él y me alejé de Dios. Tengo 46 años y él 27. Estamos juntos hace dos años. Hace un tiempo mi hijo de 16 años me insultó con malas palabras y lo golpeó a él. Después, continuamos juntos, pero en casas separadas. Él dijo que, para volver a vivir juntos, tiene que ser sin mi hijo. No puedo hacer eso y no tengo fuerzas para resolver esa situación. Oriénteme, por favor.” – Amiga.
Respuesta:
Amiga, en mi opinión, ¡usted debería huir de esa relación cuánto antes! Las cosas de Dios suman en nuestra vida, no restan. Por culpa de esa relación, ¡usted abandonó su fe y ahora le está costando la separación de su hijo! Yo entiendo que usted no se sienta capaz de superar lo que siente por ese hombre, sin embargo, nuestro Dios está muy cerca de usted, listo para extender Sus manos y ayudarla a recomenzar. ¡Deshágase de todo lo que le ha impedido entregarse a Él de verdad y verá que todo cambiará en su vida!
(*) Pregunta respondida por Flávia Barcelos, que hace la obra de Dios en Inglaterra.