La envidia puede ser definida como una voluntad frustrada de poseer cualidades, posesiones o habilidades de otra persona, resumida en: no solo tener lo que le pertenece al otro, sino también ser como él es.
Originaria de la antigüedad, la envidia es considerada uno de los siete pecados capitales. La realidad es que desde los primeros días hasta la actualidad ese sentimiento paraliza la vida de famosos y desconocidos, dejándolos sin poder de reacción y, en poco tiempo, los lleva a la destrucción total.
María Cristina, de Ribeirão Preto, interior de San Pablo, cuenta que llegó a ser víctima de ese sentimiento maligno. Con una buena vida y un marido dedicado, se vio al borde de la muerte debido a la envidia. “Perdimos la hacienda, los autos, tuve mi matrimonio afectado por las peleas, entré en una profunda depresión e intenté suicidarme dos veces. Hasta que me di cuenta de que necesitaba darle un fin a esa terrible realidad, lo cual era difícil de aceptar”, recuerda.
Al recibir una invitación para buscar a Dios, en la Iglesia Universal, ella encontró una fuerza mayor capaz de deshacer todas las obras malignas de su vida. “Hoy, le doy gracias a Dios por encontrar la puerta de la IURD abierta en el momento en que más lo necesitaba. Aquí me liberé de todos los males y rehice mi vida en todos los aspectos. Yo sé que en la presencia de Dios, y con el cuerpo cerrado, la envidia no me aflige más”, determina.
Participando de las reuniones que se realizan los martes y viernes usted puede ser liberado de este mal. Venga a las 8, 10, 16 o 20 hs.
Medios de transporte para llegar al Cenáculo Mayor del Espíritu Santo en Av. Corrientes 4070, Almagro. Líneas de Colectivos:15, 19, 24, 26, 36, 52, 71, 90, 92, 99, 105, 109, 112,124, 127, 146, 151, 160, 168. Red de Subterráneos: Línea B Estación Medrano (Av. Corrientes y Medrano). Línea A, Estación Castro Barros (Av. Rivadavia y Medrano). Puedo buscar una IURD cerca a su domicilio, haciendo clic aquí.