Su esposo (a) ¿se equivocó en algo? Tal vez haya mentido, en la vida económica le haya decepcionado o incluso hizo algo que le hirió profundamente a usted.
Usted tiene dos elecciones: perdonar o guardar resentimiento.
Guardar resentimiento da mucho trabajo, pues usted queda siempre recordando lo que sucedió, con aquel error siempre en su mente, alimentado la rabia y el sentimiento de injusticia… y claro, echar en cara de la persona aquellos momentos en casos inoportunos.
La otra opción es perdonar. Una decisión inteligente que lleva apenas algunos segundos. Un esfuerzo mental para superar los sentimientos negativos todas las veces que recordara lo sucedido. Con el pasar del tempo, los sentimientos van muriendo por desnutrición hasta que el perdón total asume el control. Mucho más fácil rápido y práctico.
Pero muchas personas insisten en recurrir al más difícil, no es que no sean inteligentes. Solo que ellas insisten en alimentar la rabia, pero acaban terminando su relacionamiento.
Si su compañero se equivocó con usted, pero está sinceramente arrepentido y se esfuerza para cambiar, usted no debe estropear ese proceso desenterrando lo que paso y usando su dolor como un castigo contra él o ella. Es un hecho que todos erran, si usted estuviera en esta posición deberá tomar una opción, que debe ser firme, pero si una sincero cambio está pasando entonces entregue todo para un buen final.