Originaria de la antigüedad, la envidia es considerada uno de los siete pecados capitales. Es un sentimiento que codicia la felicidad, el éxito o lo que haya de bueno en la vida de los demás. Ese es uno de los sentimientos que puede causar mayores angustias al ser humano. Existen casos en los que la envidia es tan grande que termina transformándose en rabia, ira e incluso en odio.
La realidad es que desde los primeros días hasta la actualidad ese sentimiento paraliza la vida de famosos y desconocidos, dejándolos sin poder de reacción y, en poco tiempo, los lleva a la destrucción total.
María Cristina, cuenta que llegó a ser víctima de ese sentimiento maligno. Con una buena vida y un marido dedicado, se vio al borde de la muerte debido a la envidia. “Perdimos la hacienda, los autos, tuve mi matrimonio afectado por las peleas, entré en una profunda depresión e intenté suicidarme dos veces. Hasta que me di cuenta de que necesitaba darle un fin a esa terrible realidad, lo cual era difícil de aceptar”, recuerda.
Al recibir una invitación para buscar a Dios, en la Universal, ella encontró una fuerza mayor capaz de deshacer todas las obras malignas de su vida. “Hoy, le doy gracias a Dios por encontrar la puerta de la Universal abierta en el momento en que más lo necesitaba. Aquí me liberé de todos los males y rehice mi vida en todos los aspectos. Yo sé que en la presencia de Dios, y con el cuerpo cerrado, la envidia no me aflige más”, determina.
Hay una sola manera de liberarnos de los estragos que ese sentimiento puede llegar a provocar en nuestras vidas.
Protéjase de la envidia, participe este viernes a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 hs. en la Reunión de la Descarga, en Avenida Corrientes 4070 en el Barrio de Almagro, o en una Universal cercana a su casa.
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