En Estados Unidos, precisamente en Texas, una mujer robó una botella de vino con un solo objetivo: ver a su novio en la cárcel. Sí, ella estaba desesperada por ver a su amor, quien había sido detenido horas antes. Alicia Walicke declaró “quería ver a mi pareja, él se encontraba detenido”.
Alicia fue acusada por delito de hurto, un robo menor y debió pagar una fianza en dólares de más de cuatro cifras. La Policía explicó que la mujer había sustraído una botella de vino de 3,99 US$ de una estación de servicio. La declaración indica que al momento del arresto ella estaba bebiendo el vino y le dijo a los policías que necesitaba ver a su novio, que necesitaba ir a la cárcel. Las autoridades no revelaron el nombre de su novio y tampoco dijeron si la mujer lo pudo ver.
Esta noticia nos lleva a preguntarnos si vale la pena cometer esta clase de locuras en nombre del amor porque una cosa es demostrar el amor y el cariño y otra muy diferente es actuar sin pensar. En primer lugar debemos definir qué es el amor. Según la Palabra de Dios: “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.”, (1 Corintios 13:4-7).
Claro que no es sencillo vivir este amor en la relación de pareja, pero es completamente imprescindible para no herirse al ser llevado por los impulsos. Hay muchas maneras de practicar el amor inteligente y sorprender a su pareja. No se pierda los consejos para aprender a tener las actitudes correctas para ser feliz, en de la Terapia del Amor este jueves a las 16 y 20 en Av. Corrientes 4070, Almagro.
[related-content]
