El pasado 6 de septiembre a las 3 de la mañana se dio inicio a una vigilia muy especial, miles de personas se hicieron presentes con grandes expectativas para su vida espiritual. Horas antes, de cada Universal de Capital y del Conurbano Bonaerense se acercaban personas con un mismo objetivo: ser llenos del Espíritu Santo.
El obispo Djalma dio inicio a esta vigilia mostrando que la Palabra de Dios afirma: “Yo amo a los que me aman, y me hallan los que temprano me buscan”, (Proverbios 8:17). “Dios está diciendo que aquellos que no Lo dejan para después, sino que Lo buscan ahora, estos Lo hallarán. El hecho de buscar a Dios temprano no hace referencia al horario, sino a que es lo primero que uno busca cuando el Espíritu Santo es su prioridad.
Quien tiene sed del Espíritu Santo aprovecha cualquier oportunidad para buscarlo, también crea oportunidades para hacerlo. Pero esto es solamente posible para aquellos que tienen verdaderamente sed de Su Espíritu. El Espíritu Santo es la prioridad de los sedientos”, explicó el obispo.
A continuación en una misma fe y en un solo espíritu buscaron y adoraron a Dios, cada uno de los presentes fue lleno de Su presencia. Sin dudas fue una noche bendecida en que el Espíritu Santo sació la sed de todos aquellos, los sedientos, que no midieron esfuerzos para buscarlo.
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