Paola Flores sufría en distintas áreas de su vida, sin embargo, al buscar la ayuda en el Dios Vivo encontró la solución a todos sus problemas, de esta manera comenzó a vivir una vida llena de alegría y bendiciones. Ella sufría con nerviosismo, le daban crisis de nervios y se autoflagelaba. “Recuerdo que me cortaba, sentía mucho odio por mi papá y escuchaba voces que me llamaban, era un infierno”, cuenta.
El asma le impedía llevar una vida normal, porque constantemente le faltaba la respiración. “Llegué a no tener ganas de vivir, una vez tomé pastillas para terminar con todo”, agrega conmovida.
En esa situación, enferma y con problemas de origen espiritual, llegó a la Universal. Comenzó a participar de las reuniones y obtuvo fuerzas. Tuvo que perseverar en las cadenas de liberación para ser libre del odio, del nerviosismo y de los pensamientos de suicidio, sin embargo, al usar su fe fue venciendo todo lo que la había afectado durante tanto tiempo.
“Hice las cadenas con determinación y fui libre del nerviosismo, fui sanada del asma y el odio que sentía por mi papá desapareció. Hoy tengo ganas de vivir, soy feliz y eso es gracias a Dios. Él me dio una nueva oportunidad, una nueva vida”, finaliza sonriendo.
Ella concurre a la Universal de Chajarí en Av. 9 de Julio 2200, Entre Ríos.
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