Las mujeres se preocupan por las várices, pero los hombres también suelen tener problemas conellas. Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) demuestran que, aproximadamente el 30% de la población mundial, sufre con ese trastorno, y los hombres representan el 30% de ese total.
Las venas dilatadas, tortuosas e insuficientes para la transmisión ideal de la sangre, se presentan generalmente en las piernas y, cuando no son bien tratadas, pueden traer problemas más serios, como la trombosis.
Algunas personas nacen con la predisposición a desarrollar várices, otras las adquieren a lo largo de la vida por alteraciones hormonales, a causa de la edad o de los hábitos desarrollados. En todos esos casos, es posible tener algunos cuidados para amenizar los síntomas. Véalos a continuación:
*Aliméntese bien. Una dieta bien elaborada contribuye de diversas maneras al cuidado de la salud. Una de ellas es el control del peso. Cuando su cuerpo está bien equilibrado, las venas de sus piernas sufren menos.
*Muévase. Permanecer mucho tiempo parado en la misma posición, sentado o de pie, es perjudicial para la circulación sanguínea. Muévase. Por cada hora sentado, por ejemplo, camine por lo menos 5 minutos.
*Cuidado con las hormonas. Las terapias dereemplazo hormonal afectan directamente a la circulación sanguínea. En el caso de las mujeres, por ejemplo, incluso la píldora anticonceptiva trae consecuencias. Converse con su médico y aclare toda y cualquier duda.
*Ejercítese. Las actividades físicas regulares y bien orientadas, principalmente aquellas que trabajan la musculatura de la pantorrilla, son fundamentales para el combate de las várices.
Acuérdese que mantener las consultas y exámenes médicos siempre al día, evita mayores problemas.
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