Usted llegó a la conclusión de que ama a su novia y quiere pasar el resto de su vida con ella.
Usted se quiere casar, pero tal vez el miedo a la responsabilidad, las muchas cosas que piensa que deben realizar antes, han hecho que postergue ese paso.
“Sí amor, yo me quiero casar, pero primero tenemos que…”
*Pagar nuestras deudas
*construir nuestra casa
*terminar la facultad
*conseguir un empleo mejor
*juntar dinero para la fiesta
*aprender inglés
*ayudar a mi mamá
*comprar las alianzas
*aprender ruso
*vivir juntos para saber cómo es
*adoptar un loro
*hacer un intercambio en Francia
*(pero para eso tenemos que aprender francés)
*conseguir lugar en aquel salón de fiestas
*esperar que cambie el gobierno y que pase la crisis
*orar y ver si es la voluntad de Dios
*aprender checheno
*perder unos 10 kilos para estar en forma
*participar de un reality show
Ok. Si usted no quiere casarse, no enrede a la muchacha. El hombre que es hombre no hace eso. O es o no es. (Mujeres, si él no se decide, entonces ustedes necesitan decidir por él. A veces él necesita un incentivo.)
No se quede más paralizado por la duda. Si es ella y usted está seguro, dé un paso de coraje. Pídale casamiento. Cuando yo estuve de novio con Cristiane, no tenía nada, solo la seguridad de que juntos y con la bendición de Dios, íbamos a enfrentar lo que viniera. Y fue la mejor decisión que tomé. Nunca nadie está 100% preparado, pero ustedes pueden tener la seguridad de que quieren construir una vida juntos.
El jueves 20 de agosto tendremos el placer de bendecir su noviazgo en el Templo de Salomón. Si ustedes quieren intercambiar sus alianzas de compromiso en la presencia de Dios, preparándose para el casamiento, estarán a las 20 h (sin atrasos) y traerán, por lo menos, dos testigos con ustedes. La participación es gratuita, pero la bendición que recibirán no tiene precio.
Más detalles sobre el evento aquí. (El evento también tendrá lugar en todas las localidades que se realiza la Terapia del Amor en Brasil.)
Si ustedes están comprometidos pero el compromiso es turbulento, o ya están comprometidos hace tiempo y el casamiento nunca llega, vengan también a participar.
Tenemos consejos importantes para ustedes.
Extraído Blog Obispo Renato Cardoso
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