“Pude abrir dos negocios”
Cristian: “Antes de participar de la Hoguera Santa en el Templo de Salomón mi vida económica estaba completamente trabada. En tres oportunidades abrí un negocio pero por diferentes motivos tuve que cerrarlos. Me vi forzado a salir a vender a la calle y lo poco que generaba se usaba para comer, no nos alcanzaba para pagar las deudas que teníamos.
Tomé la decisión de sacrificar en la Hoguera Santa porque quería una solución. Gracias a Dios pude abrir dos negocios, están creciendo día a día y nuestra situación cambió”.
“El fibroma y las hemorragias desaparecieron”
Sabina: “Hacía tres meses que sufría hemorragias, estaba muy débil y anémica, incluso ya no veía bien. El médico me hizo estudios y detectó un fibroma sangrante. No podían medicarme porque no sabían si era benigno o maligno.
Decidí usar la fe y participar en la Hoguera Santa del Templo de Salomón. El sangrado se detuvo en el momento en que tomé el sobre y, gracias a Dios, el fibroma desapareció. Estoy trabajando nuevamente y mi salud está perfecta”.
“Mi bebé salió del coma”
Vanesa: “Tuve un problema con mi bebé, él había sufrido un paro respiratorio a los doce días de vida. Los médicos lo reanimaron, pero me dijeron que tenía muerte cerebral. Incluso me sugirieron conversar con mi esposo para desconectarlo y dejarlo morir, porque no iba a recuperarse.
Me acerqué a la Universal y decidí sacrificar en la Hoguera Santa del Templo de Salomón. Dios me respondió, mi bebé salió del coma, comenzó a moverse y los médicos no lo podían creer. Gracias a Dios ya le dieron el alta y está conmigo”.
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