Responda rápido: Usted, ¿ya publicó o compartió algo en internet y se arrepintió? Recuerde las redes sociales más antiguas que ha visitado como Orkut, por ejemplo, y de las más nuevas como Instagram, Facebook, Twitter, además de los blogs y MSN. ¿Qué ha publicado en el pasado que hoy podría causarle vergüenza o problemas? Pues, sepa que cualquiera todavía puede encontrar esos archivos.
Por más que no estén disponibles “al público en general”, los archivos, una vez publicados en internet, están almacenados casi eternamente. Imagine una biblioteca. Los periódicos y las revistas de hoy están en los estantes, donde todos pueden verlas. Los libros actuales y los grandes clásicos generalmente son de fácil acceso. Por otro lado, aquellos libros menos leídos, de autores menos conocidos, van quedando en los estantes más altos, difíciles de alcanzar, otros van hacia salas cerradas. Pero una biblioteca no desecha sus libros, después de todo, alguien pagó por ellos y nunca se sabe cuándo volverán a ser importantes.
Por eso, internet es como una gran biblioteca. Es decir, aunque usted haya escondido aquel manuscrito entre grandes libros, en la esquina superior del último estante, alguien siempre puede encontrarlo, sin querer o queriendo.
Y a usted, ¿le gustaría poder romper y desechar algo que se encuentra en esa biblioteca?
Eliminar permanentemente
Existe una campaña en Gran Bretaña llamada iRights que lucha para que las personas puedan eliminar lo que publicaron en internet, pero ahora creen que es irrelevante y embarazoso. La idea se enfoca en los jóvenes que maduraron y no quieren que algunas cosas antiguas se encuentren en el mundo online.
La iRights hace esta campaña para que editar y eliminar permanentemente esos antiguos archivos sea posible y fácil. Después de todo, las personas frecuentemente sufren bullying o son juzgadas por errores o gustos del pasado.
Y en la vida real, ¿existe el botón “eliminar”?
Si en internet la vergüenza por un antiguo hecho puede ser grande, ¿cuál es el peso que antiguos hechos aún tienen en la vida real? Errores del pasado, malas elecciones, traumas… ¿Todo eso puede ser eliminado?
Muchos creen que no, después de todo, lo que usted ha hecho siempre quedará marcado en su vida y usted siempre será juzgado por eso. No importa el arrepentimiento o cuántos años han pasado, algunas personas creen que nunca podrán librarse de las acciones del pasado.
Sin embargo, la española Elena Fernández, no está de acuerdo. Cuando era más joven, sufrió por la adicción y esto hizo que cometiera actitudes de las cuales enseguida se arrepentía.
“Salía a los bailes y allí buscaba una manera de olvidar todos mis problemas y el vacío en mi interior”, cuenta. “Mi vida estaba totalmente destruida en las áreas económica, sentimental y familiar. Incluso llegué a prostituirme y a consumir drogas.”
Sin embargo, el botón “eliminar” le fue presentado por la Universal. “No He venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.” (Lucas 5:32)
Ella era una pecadora arrepentida de sus acciones del pasado. Quería una vida nueva, algo diferente de lo que había vivido hasta entonces y que la hiciera abandonar los errores del pasado en el propio pasado.
“Cuando escuché las orientaciones, comencé a ponerlas en práctica. Vi los resultados, y noté una diferencia en mi interior, fui dejando las drogas que consumía y comencé a reconstruir mi vida poco a poco.”
En la Universal no fue juzgada por su pasado, sino que recibió ayuda y le presentaron un nuevo futuro posible.
Ahora ella es feliz, completa, con proyectos y en búsqueda de sus sueños. Su pasado fue eliminado y solo sus nuevas actitudes están presentes en su vida.
¿Usted también necesita eliminar su pasado? Participe de la reunión del Encuentro con Dios y aprenda a usar su fe para dejar el pasado atrás.
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