“Ah, si pudiera volver en el tiempo, haría todo diferente” o “no puedo creer que hice eso de nuevo. ¿Dónde tenía la cabeza?” Usted, probablemente, ya oyó a alguien decir una de estas frases. Son expresiones dichas por personas que se arrepintieron de sus decisiones.
Los errores forman parte de la vida de todas las personas. Al identificarlos, usted debe comprender las causas y orígenes, para evitar que ellos se repitan. Esa postura indica aprendizaje y resulta en crecimiento.
El problema es cuando esas frases son dichas con más frecuencia de lo que nos gustaría. Si usted comete las mismas actitudes equivocadas hace muchos años y no logra detenerse, usted pudo haberse convertido en una coleccionista de errores.
La escritora y columnista Tânia Rubim aconseja cómo frenar el ciclo de la repetición. “Pare y piense siempre. Antes de arriesgarse a tomar una actitud y pregúntese: ¿eso será bueno para mí? ¿Eso me perjudicará mañana? ¿Qué consecuencias puede haber? Si las respuestas de esas preguntas son negativas o si existe un mínimo de duda, entonces, no será bueno”, aconseja.
Madure
Las fallas solo traen beneficios cuando aprendemos con ellas y no las repetimos más. La persona que se equivoca constantemente demuestra poca madurez, porque no ve en qué se está equivocando. Además de los arrepentimientos, ella también colecciona daños, pues toda actitud viene acompañada de una consecuencia.
Muchas mujeres pierden dinero porque no saben controlarse. Otras mantienen un estilo de vida destructivo y perjudican su salud. Están también aquellas que siempre se involucran con hombres equivocados y no saben por qué actúan así. En fin, el sufrimiento es constante y la colección de errores puede ser enorme.
Tânia incluso, agrega que la mejor manera de evitar cometer fallas continuas es dejar de actuar por la emoción, por el deseo o por el impulso.
“Si las personas supieran lo cuán importante es pensar, reflexionar y ponderar, con seguridad, evitarían muchos errores. No sea inconstante. Es necesario analizar bien sus pasos y tomar decisiones correctas para su vida”, concluye.
Busque ayuda espiritual
Si usted se ha sentido débil delante de tantos errores, si los problemas y las muchas responsabilidades lo han sofocado, acérquese a una Universal cercana a usted, y reciba consejos de hombres y mujeres de Dios.
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