La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estimó que la cifra de adultos mayores en la región pasará de los 57 millones actuales a más de 180 millones en 2050, es decir más de una cuarta parte de la población total proyectada. En la actualidad, en Argentina 86.441 personas viven en residencias para adultos mayores (según el INDEC).
Muchos de esos ancianos que trabajaron toda la vida y que se dedicaron a la familia fueron abandonados en asilos y pasan semanas y hasta meses sin recibir ninguna visita. Muchos parientes dedicaron sus vidas a trabajar y a estudiar, sin embargo no les dan atención a aquellos que un día tanto los ayudaron.
Por eso, conocer a estas personas, sentirse útil en una sociedad individualista y desarrollar la conciencia social, son beneficios desarrollados por la Universal. Recientemente, 15 integrantes del proyecto Ciudadanía, del la Fuerza Joven Universal (FJU) de Mato Grosso del Sul (Brasil), realizaron una visita al hogar de ancianos Casa de Abraão. El proyecto pretende llevar una vida mejor a los ciudadanos, incluyendo a los de la mejor edad.
“Llevamos juegos, presentaciones de bailes, cortes de cabello, maquillaje, le pintamos las uñas de las mujeres, que dicho sea de paso son muy elegantes, también hicimos donaciones de pañales para adultos conforme a la necesidad de la casa. Y claro, siempre llevamos la Palabra de Dios, la Salvación y oramos por todos ellos”, explicó Ruth Souza, responsable por el grupo Ciudadanía.
Por otro lado para los residentes del asilo, recibir a los voluntarios semanalmente es una oportunidad de encontrar la alegría por medio del cariño y de la atención. La anciana que solo se identifica como Luzia vive en el lugar hace dos años, porque necesita tratamientos médicos y está imposibilitada de caminar. Pero a pesar de los momentos difíciles por los cuales pasa, el día de la visita, ella recobró ánimo para seguir adelante y encontró motivos para sonreír.
“Nuestro objetivo fue proporcionarles un día diferente, distribuimos regalos y presentamos obras de teatro, pero por encima de todo, les dimos lo que más necesitaban: la Palabra de Dios, cariño y atención”, concluye el pastor Paulo Almeida, responsable por el trabajo de la FJU en el estado de Mato Grosso del Sul.
Si usted también quiere ayudar en las acciones solidarias o conoce a alguien que necesita apoyo social, acérquese a una Universal más cercana a su casa e infórmese sobre el grupo Fuerza Joven Universal (FJU). Ingrese aquí y vea la dirección más cercana a usted.
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