Mientras que la industria del matrimonio afirma que la unión solo sucede cuando la pareja realiza una gran fiesta, la vida real muestra exactamente lo contrario. Varias parejas de famosos prueban que una gran celebración no es garantía de la felicidad sentimental.
El actor Eddie Murphy y la productora Tracey Edmonds, gastaron millones para realizar una fiesta lujosa en una isla paradisíaca, en la Polinesia Francesa, y se divorciaron dos semanas después. Con la actriz y cantante Liza Minelli y el productor David Guest no fue diferente. La celebración que constó US$ 4,3 millones de dólares no garantizó la unión de la pareja, que se divorció años después. Por eso, para que el tan soñado matrimonio no traiga dolores de cabeza posteriores, es necesario planear cada detalle de forma racional e inteligente.
La economista y especialista en ingeniería económica Noemi da Silva Ferreira da algunos consejos y advertencias importantes. “Más que el día a día de la ceremonia, los novios deben preocuparse por la vida cotidiana que pasarán a disfrutar juntos. Es interesante separar los gastos de corto y largo plazo, de los gastos innecesarios y superfluos para que se eviten problemas futuros”, enseña.
Para ella, una de las mayores causantes de peleas entre las parejas es la falta de dinero o el mal uso. “Para la concretización de sueños futuros es imprescindible que la pareja ahorre dinero. Por lo tanto, contraer deudas sin planear puede afectar la relación”, agrega Noemí.
Un estudio realizado por la Universidad de Emory, en Estados Unidos, muestra que la economista tiene razón. Investigadores entrevistaron aproximadamente a 3.100 personas y llegaron a la conclusión de que, al contrario de lo que la industria del matrimonio afirma, la duración de la relación no tiene nada que ver con el valor de los gastos de la ceremonia. Por lo contrario: el estudio afirma que, cuanto más se gasta con la fiesta, mayores son las posibilidades de divorcio.
No sirve gastar mucho
No es la gran y hermosa fiesta que garantizará la durabilidad de la relación. Marcelo Santos, de 24 años, y Rayane Santos, de 23 años (foto de al lado), no sabían sobre eso hasta el momento que se conocieron.
“Nos pusimos de novios tres años y, cuando nos comprometimos, conversamos mucho sobre la planificación financiera. Al comienzo no queríamos fiesta. Primero por opción personal. Segundo por causa del trabajo”, cuenta.
Rayane dice que los familiares insistieron para que hagan fiesta. Por eso, decidieron hacerla. “En el comienzo, la idea me atemorizaba, por causa del costo, pero decidimos hacer todo dentro de nuestras posibilidades. En ningún momento optamos por algo que no estaba a nuestro alcance”, recuerda.
La pareja se organizó para que la relación comenzara libre de deudas relacionadas a la boda. “Desde el inicio, priorizamos nuestra estabilidad luego de la ceremonia. La madurez de invertir en la vida de casados y no solo en el día en el que se comienza, nos hizo frenar gastos. Sabíamos que sería tan solo un día y que esta fecha no podría traer perjuicios futuros”, observa Marcelo.
Ellos aconsejan que todas las parejas planeen. “La conciencia tranquila después del casamiento es mejor, siendo que la vida de pareja ya es difícil en lo que se refiere a la adaptación. Nuestro matrimonio fue la prueba de que es posible hacer una fiesta bonita sin dolores de cabeza”, afirma Rayane.
Organice con anticipación
El inicio de la vida juntos exige grandes responsabilidades y por eso es fundamental calcular los ingresos y los gastos para que haya armonía en el nuevo hogar.
El conductor y conferencista Renato Cardoso resalta que el día a día de la pareja es mucho más importante que la fiesta de casamiento. “La pareja debe sentarse con un lápiz y un papel en la mano, calculadora, extractos bancarios y reunir toda la información del presupuesto familiar. Usted puede usar un simple cuaderno para hacer su presupuesto todos los meses”, explica.
Él revela incluso, que es el respeto mutuo y la atención dedicada al compañero lo que garantiza el éxito de la unión. La planificación financiera forma parte de ese cambio. “Así, ustedes descubrirán que es posible tener esa fiesta día a día en su casa”, concluye.
Tanto Renato como la economista Noemí da Silva Ferreira insisten en recordar que la regla principal de la economía siempre es gastar menos de los que se gana. Entonces, si usted coloca eso en práctica, su matrimonio tiene todo para ser exitoso.
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10 consejos para realizar la planificación u organización familiar
- Respete la organización y los gastos.
- No compren por impulso. Comparen precios antes de comprar.
- Prioricen lo que realmente es necesario.
- Paguen de contado y pidan descuentos.
- Pongan metas a corto y largo plazo.
- Estudien las inversiones más adecuadas, de acuerdo al presupuesto.
- Establezcan prioridades y límites en los gastos.
- Creen una reserva de emergencia.
- Intenten aumentar los ingresos familiares.
- Analicen el resultado financiero.
Fuente: Noemí da Silva Ferreira, economista y especialista en ingeniería económica.
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