“Y Gedeón edificó allí un altar al Señor y lo llamó El Señor es Paz [], el cual permanece en Ofra de los abiezeritas hasta hoy.” Jueces 6.24
Todas las personas que llegan al Altar del Altísimo encuentran la perfecta Paz, la cual fue proporcionada por su Hijo Jesús, EL PRÍNCIPE DE LA PAZ, que vino al mundo para salvar a los perdidos en las tinieblas.