Por cada persona a la que se le extraen 450 ml. de sangre de su organismo se pueden salvar hasta tres vidas…
El 15 de marzo de 2010, en la ciudad española de Barcelona, una delegación del Ministerio de Salud de la Nación defendió la postulación argentina ante la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Federación Internacional de Organizaciones de Donantes de Sangre (FIODS), la Sociedad Internacional de Transfusión Sanguínea (SITS) y la Federación Internacional de Asociaciones de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
Como resultado de ello, Argentina fue elegida como sede central del Día Mundial del Donante de Sangre 2011. Por este motivo, el 14 de junio se convertirá en el primer país latinoamericano en que se lleve a cabo este evento internacional.
La fortaleza de la propuesta aprobada se basa en aspectos referidos a la dimensión ética, integración gobierno-sociedad y enfoque regional.
Sobre la dimensión ética, se especificó que la donación de sangre voluntaria y no remunerada encierra un profundo sentido ético. Argentina sanciona y reglamenta la Ley Nacional de Sangre durante la década del 80, cuyos principios fundamentales son la donación voluntaria de sangre y la prohibición de todo tipo de lucro con el recurso sangre humana.
Acerca de la integración gobierno-sociedad, se puso de relieve que en la Argentina la sangre humana se constituye en una política de Estado y, como tal, debe basarse en un esfuerzo conjunto entre gobierno y sociedad, por lo cual la transfusión sanguínea se constituyó en un modelo paradigmático.
Por último, el enfoque regional hace hincapié en la convocatoria a programas nacionales de sangre y a las organizaciones de la sociedad civil de todos los países de Latinoamérica a participar de los festejos del Día Mundial del Donante y proyectar hacia el mundo esta unión para esta conmemoración.
Hacia el cambio de modelo de donación de sangre
El objetivo de este año es impulsar el cambio de modelo de donación de sangre predominante en la región.
En este sentido, bajo el lema “más sangre, más vida” se espera que el 2011 se convierta en un punto de inflexión en el modelo de donación de sangre predominante en Argentina y Latinoamérica –sustentado en la reposición por parte de familiares y amigos– y logre impulsar la donación voluntaria y habitual proveniente de poblaciones de bajo riesgo.
Datos y Estadísticas
Argentina subió del 3 al 23 el porcentaje de donaciones voluntarias de sangre que se emplea en la realización de trasplantes de órganos, tratamientos contra el cáncer, transfusiones para enfermedades crónicas como la anemia congénita y complicaciones del parto en embarazos no controlados.
Los datos se desprenden de una estadística del Ministerio de Salud de la Nación. La medición se hizo de 2004 a 2010 y si bien en ese lapso subió 20 puntos el porcentaje de donantes voluntarios de sangre en el país, la cartera sanitaria manifestó la necesidad de contar con 1.000.000 de personas que den sangre dos veces al año en forma voluntaria, para reponer el plasma que necesita la salud pública.
La meta para el 2015 es alcanzar el 50% de donación voluntaria y habitual y aumentar el índice de donantes del 24 por mil a 35 por mil”.
Se sabe que 9 de cada 10 personas necesitarán, durante su vida, una transfusión de sangre para ellos o para algún familiar. La búsqueda de dadores, especialmente en medio de situaciones críticas, se facilitaría si la donación de sangre comienza a ser un hábito más frecuente.
Es importante tener en cuenta que, por cada persona a la que se le extraen 450 ml. de sangre de su organismo se pueden salvar hasta tres vidas.
