El bautismo en las aguas rompe los lazos del hombre con la vida eterna, y lo une a Dios
Obispo, ¿mis hijos pueden ser bautizados? – Amiga.
Respuesta:
Una persona está lista para el bautismo solamente después de tener la certeza de que se arrepintió de sus pecados y tiene completa fe en el Señor Jesús. Por eso no bautizamos niños, porque el bautismo exige total arrepentimiento de los pecados. ¿Cómo puede un niño arrepentirse de los pecados que no tiene?
Si un niño no tuviere pecado, no hay necesidad de arrepentimiento. Si no hay necesidad de arrepentimiento, entonces, no hay necesidad de bautismo.
Los niños deben ser presentados a Dios, de acuerdo con lo que está escrito:
“Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.”, (Marcos 10:16)
(*) Respuesta retirada del blog del obispo Julio Freitas