HIJO OBEDIENTE:
«Bienaventurado todo aquel que TEME AL SEÑOR, que anda en Sus caminos. Cuando comas del trabajo de tus manos, dichoso serás y te irá bien.
Tu mujer será como fecunda vid en el interior de tu casa; tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. He aquí que así será bendecido el hombre que TEME AL SEÑOR». Salmos 128:1-4
HIJO REBELDE:
«VIO, pues, Esaú que las hijas de Canaán no eran DEL AGRADO DE SU PADRE ISAAC; y Esaú fue a Ismael, y tomó por mujer, además de las mujeres que ya tenía, a Mahalat, hija de Ismael, hijo de Abraham, hermana de Nebaiot». Génesis 28:8-9