La PLOS One, renombrada revista científica internacional, publicó un artículo sobre un análisis de la coordinación de las manos humanas en la actividad de agarrar objetos. La publicación de la investigación en sí no generó problemas. Sin embargo, la conclusión del estudio -liderado por el chino Ming-Jin Liu – fue que la arquitectura del cuerpo humano, por causa de su complejidad, solo pudo haber sido pensada por el Creador (“the Creator”, en la publicación original), atribuyendo el fenómeno de la existencia humana a Dios. Debido a esto, el sitio de la revista recibió muchos comentarios negativos, que llegaron a las redes sociales.
Los críticos alegan en publicaciones que esa conclusión no podría ser considerada “científica”. Ellos creen que la afirmación de la “acción de Dios” es una manera de manipular las observaciones para discordar con lo que sería una respuesta adecuada, refiriéndose a la Teoría de la Evolución.
Debido a la presión de los lectores en contra de la aceptación de la idea de Dios como Creador, la revista PLOS One publicó una disculpa sobre el texto de Ming-Jin Liu.
Algunos estudiosos amenazaron con retirar sus publicaciones de la revista por considerarla inapropiada para el medio académico, y otros llegaron a decir que dejarían el cargo que ocupan como científicos si la revista no tomaba alguna medida más agresiva con las publicaciones que citan a Dios como el Autor del Universo.
¿Intimidado con la repercusión?
Así, con el objetivo de ponerle fin a la polémica, el investigador chino dejó su respuesta a los lectores, diciendo que el uso de la palabra “Creador” ocurrió debido a la falta de familiaridad que tenía con el idioma inglés. Añadió que, de hecho, quería escribir “Naturaleza” – haciendo referencia a la teoría científica aceptada por la comunidad de investigadores.
Posiblemente, Ming-Jin Liu se sintió intimidado con la repercusión de su estudio publicado.
La fe también es “razón”
La ciencia, realmente, trajo recursos positivos a la humanidad. Muchas tecnologías permiten que los seres humanos cuiden mejor su salud y tengan más calidad de vida. Sin embargo, es importante que no haya extremismo.
En la Biblia encontramos numerosos milagros realizados por Dios, que no se pueden explicar con claridad y certeza en la ciencia. Está el componente espiritual en la existencia de la humanidad.
La ciencia ha comprobado que muchos pasajes registrados en la Biblia fueron reales.
El libro de Job, por ejemplo, fue escrito en la Edad del Bronce, hace aproximadamente 3,5 mil años, época muy distante del nacimiento del físico Isaac Newton. La “ley de la gravitación universal”, que comprueba la órbita de los planetas en el espacio, que aún no existía. Sin embargo, en el libro de Job, se describe una escena de la Tierra como si fuera vista desde el espacio: “…cuelga la tierra sobre nada.” (Job 26:7)
Este es uno de los ejemplos que la Biblia ya revelaba, mucho antes, lo que el hombre descubrió tiempo después – ingrese aquí y vea otros hechos interesantes que correlacionan la Biblia con la ciencia.
No debemos negar nuestra fe
El mundo se esfuerza para probar que Dios y todo Su poder no existen, porque esa es una de las herramientas que los espíritus malignos utilizan para hacer que las personas pierdan la fe en el Altísimo.
La humanidad se ha distanciado cada vez más del Creador y el fruto de eso, infelizmente, han sido las guerras, las enfermedades, la miseria y otros males que aquejan a la humanidad.
Por eso, no se sienta intimidado, como Ming-Jin Liu, no pierda la fe en Dios. No acepte las enseñanzas del mundo para su vida. Al contrario, confíe en el Altísimo y permanezca fiel a Sus consejos.
Como el Señor Jesús afirmó: “A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, Yo también le confesaré delante de Mi Padre que está en los cielos.” (Mateo 10:32)
Busque la presencia de Dios
Si usted está deprimido y cansado de los problemas, está desesperado y no sabe cómo enfrentar ese dolor, acérquese a una Universal cercana a usted, los obispos y pastores lo ayudarán espiritualmente.
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