Tocando el Manto de Luz, a las 8, 10, 12, 16 y 20h, en Av. Corrientes 4070 – Almagro y en la Universal más próxima a vos.
«Sufría de depresión, odio y angustia»
Miriam llegó a la reunión de los viernes con su vida totalmente destruida: «Tenía depresión, odio, angustia y muchos problemas en mi familia y en el área sentimental. Iba a los boliches, me emborrachaba, pero nada me llenaba.
En medio de esa situación, fui a que me tiraran las cartas. Me había separado y quería saber la razón. Sin embargo, todo empeoró. Una noche fui a bailar, bebí una jarra de distintas bebidas, que sospecho que también tenía droga, y me sentí mal.Pedí que me sacaran de ese lugar y no recuerdo qué pasó después.
En ese periodo de mi vida conocí la Iglesia Universal y comencé a participar de las reuniones de liberación. Me costó perdonar, pero, cuando decidí dejar atrás el pasado y abandoné la vieja vida, tuve un encuentro con Dios.
Hoy estoy totalmente transformada. Siento paz, tranquilidad y ayudo a otros jóvenes que atraviesan situaciones similares. Ya no soy la misma persona. Tengo una vida bendecida».
Ella asiste a la Iglesia Universal ubicada en Av. Bartolomé Mitre 3170, Moreno.
«Traficaba drogas y formaba parte de una barrabrava»
Gabriel asegura que su vida era «un infierno». Esta es su historia: «A los ocho años, empecé a fumar cigarrillo. A los doce, consumí marihuana y alcohol. Entré en la delincuencia y, dos años después, comencé a traficar drogas. Eso me llevó a formar parte de una barrabrava.
Era agresivo, mal educado con mis padres, tenía mal carácter, no toleraba a nadie, sufría de insomnio, era nervioso, sentía bronca y odio. Además, no podía tener una relación estable porque vivía drogado. Las personas decían que yo no tenía solución.
Llegué a la reunión de liberación gracias a una invitación de mi papá. Puse en práctica lo que se enseñaba y logré abandonar las malas juntas y los vicios.
Hoy tengo paz, gozo y alegría. Me convertí en un hijo respetuoso y empecé a trabajar. Mi vida sentimental fue bendecida, estoy casado y tenemos un matrimonio feliz. Al usar la fe, mi familia se restauró, ya no hay discusiones, soy un hombre tranquilo y no soy agresivo. Puedo asegurar que con Dios todo es posible y que soy un milagro».
Él asiste a la Iglesia Universal ubicada en Rioja 1448, Mendoza.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este sitio, como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina ni de quienes la practican. NO DEJES DE CONSULTAR A TU MÉDICO.