“Obispo, me llamo Dany y me gustaría pedirle una orientación. Conocí a una persona hace un tiempo atrás que me lastimó mucho. Me hizo varias cosas terribles. Traicionó mi confianza. Desde entonces, guardo este dolor en mi interior y sé que eso no es bueno. No quiero perder mi salvación, pero no logro perdonarlo. Ayúdeme, por favor. ¿Qué debo hacer?”, Dany A.
Respuesta:
Dany, una de las formas más eficaces de perdonar a una persona es orar por ella. Su dolor no afecta a ese muchacho, sólo a usted misma. Es como alimentar un sentimiento malo en su interior. ¡Obviamente que quien va a sufrir va a ser usted!
(*) Texto extraído del blog del obispo Edir Macedo.