Paso 1
Este desafío será mucho más difícil que el #11 multiplicado por dos. Los ojos del hombre se sienten atraídos por las mujeres, especialmente cuando son jóvenes y bellas.
Existen buenas razones por las que Dios nos creó así. Quizás, el hombre nunca buscaría a una mujer si no se siente atraído por ella. El problema es el descontrol y la falta de disciplina.
Paso 2
Cuando el hombre mira a una mujer que no es su esposa con deseo o codicia, comienza a tener muchas complicaciones.
-Se distrae de otras actividades importantes.
– Alimenta pensamientos impuros.
– Comienza a mirar a la mujer como un objeto de placer.
– Provoca los celos de su esposa o novia.
-Da un mal ejemplo a sus hijos y a los que lo estiman.
– Estimula hábitos como la masturbación y pornografía.
El problema es tan serio que el propio Señor Jesús vio la necesidad de lidiar con él directamente:
“Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.” (Mateo 5:28). Pero antes de que Jesús hablara de eso, Job, que era marido, y padre de mujeres, había determinado la siguiente solución para vencer el problema: “Hice un pacto con mis ojos de no mirar con codicia a ninguna joven.”, (Job 31:1).
Paso 3
En aquella época, las mujeres vivían cubiertas con largas túnicas que cubrían prácticamente todo.
Hoy es casi imposible no mirar. Pero “casi imposible” no es imposible. Usted puede entrenar sus ojos para “rebotar como una pelota en el palo de un arco” cuando mire a una mujer.
Paso 4
Después y solamente después de haber comenzado este Desafío, postee su comentario en el Facebook del IntelliMen con este encabezado: Desafío IntelliMen #16 concluido: “Para mí esta experiencia fue…” (agregue una reflexión y sus conclusiones sobre este desafío).
En la próxima semana colocaremos el decimoséptimo desafío
“El Desafío del rey David marcó mi vida espiritual”
Muchos hombres y jóvenes dan su testimonio y cuentan de qué manera el Proyecto IntelliMen los convirtió en mejores hombres.
David: “El proyecto me ayudó a mejorar como hombre, cuando me presentaron y hablaron sobre el IntelliMen no lo dudé y comencé a hacerlo.
El desafío que me marcó fue el #21. Este nos enseñaba a comenzar el día como el Rey de David. Eso me sirvió mucho en mi vida espiritual.
Aprendí a valorar el tiempo, a no perderlo haciendo cosas que no me sirven.Ahora lo aprovecho en cosas productivas.
También cambié en la disciplina y en mi trabajo. Haber finalizado los #53 desafíos fue la mejor elección que hice.
Todos los que me conocen notaron el cambio en mi vida y estoy muy contento. Invito a otros hombres a que se animen a hacer los Desafíos”.
Conozca más en https://blogs.universal.org/renatocardoso/es/intellimen/