Antes de llegar al tratamiento, Jorge tenía vicios de alcohol, marihuana y cocaína: “en esa situación estuve durante ocho años. Estaba muy perdido.
Conocí la reunión de los domingos gracias a mis hijos. Ellos me decían que viniera. Tanto insistieron que vine. Luego de perseverar cada domingo en el Tratamiento, gracias a Dios, dejé los vicios. Desde hace cinco años que estoy libre, sin recaídas. El Tratamiento funciona. Vale la pena venir”.
Participe del Tratamiento para la Cura Definitiva de Todos los Vicios, a las 15 h, en la Universal más cercana de usted.