Sandra: “Comencé a venir a esta reunión de la sanidad el martes pasado. Hace más de un año me habían diagnosticado hipotiroidismo. Tenía síntomas horribles como caída de pelo y de uñas, problemas intestinales, dolor en las articulaciones y estaba siempre cansada.
Uno de los médicos me había dicho que había que punzar los nódulos que tenía en las tiroides para ver si eran benignos o malignos. El miércoles fui a ver a otro médico, revisó mis estudios y me dijo que me quedara tranquila, que no me van a punzar, que no es cáncer. Desde que empecé a venir, hay muchos síntomas que ya no los tengo, como dolor en las articulaciones, hinchazón en el estómago. Además, me peino y no se me cae el pelo.
Me encontraba mal desde hacía un año y medio hasta que tomé coraje y vine a esta reunión de sanidad. En una semana el diagnóstico cambió, gracias a Dios. Recomiendo a las personas que vengan los martes”.
¿Qué es el hipotiroidismo?
Ocurre cuando la glándula tiroides no produce suficientes hormonas tiroideas para satisfacer las necesidades del cuerpo. Esto genera alteraciones en distintos aspectos como el estado de ánimo, el peso corporal o el ritmo cardiaco.
Si usted tiene una enfermedad, además de realizarse los tratamientos médicos correspondientes, tiene la oportunidad de participar de la Reunión de Sanidad todos los martes y determinar el milagro en su salud.
Participe a las 8 h, 10 h, 16 h o 20 h, en la Universal más cercana a su domicilio.
Si en su localidad rigen las medidas sanitarias que le impiden participar de las reuniones de manera presencial, usted podrá hacerlo de manera online, a las 20 h, a través de:
La radio Red Aleluya FM 106.3 y en todas sus repetidoras en el país o por Radio Buenos Aires AM 1350.
La App Red Aleluya Argentina. Podrá descargarla gratuitamente a través de App Store o Play Store.
Si desea comunicarse con nosotros, puede hacerlo llamando al: (011) 5252-4070.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en esta página, como en el periódico y en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben interpretarse en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.