¿Sabías que el deporte es una de las mejores medicinas para controlar la glucosa en las personas diabéticas? Está comprobado que la diabetes tipo 1 y la tipo 2 responden positivamente al ejercicio.
Una de las diferencias es que las personas afectadas por diabetes de tipo 2 acostumbran a tener sobrepeso u obesidad, con lo cual no tienen la costumbre de hacer ejercicio y se les hace mucho más complicado empezar a practicarlo. No obstante, cuando empiezan a hacer ejercicio habitualmente y de forma regular consiguen perder peso y mejorar su forma física.
En cambio, las personas que tienen diabetes tipo 1 acostumbran a ser más jóvenes y se toman el ejercicio como “una medicina más” o como parte del tratamiento a seguir para controlar su enfermedad.
Beneficios del ejercicio para los diabéticos
– Mejora el control de la glucosa.
– Aumenta el gasto calórico y ayuda a perder los kilos de más y mantener el peso (factor clave en la resistencia a la insulina).
– Aumenta la sensibilidad de las células a la glucosa y aumenta el número de receptores de insulina.
– Disminuye las necesidades de insulina o de hipoglucemiantes orales.
– Mejora la actividad de las enzimas oxidativas, implicadas en el mantenimiento de las células y tejidos dañados.
– Estimula la producción de insulina en el páncreas y aumenta la sensibilidad de las células a la insulina.
– Baja la concentración de triglicéridos y ayuda a regular el colesterol en sangre.
– Produce un efecto psicológico positivo, al elevar el nivel de endorfinas, reduce el nivel de estrés, un gran enemigo de los diabéticos.
Controlar la hipoglucemia
El único riesgo de las personas diabéticas al hacer ejercicio es la hipoglucemia (bajada de los niveles de glucosa en la sangre). Los que más probabilidades tienen de sufrirla son los diabéticos que se tratan con insulina.
El cerebro necesita glucosa constantemente y cuando ésta baja en la sangre a causa de un exceso de ejercicio o por una exagerada ingestión de hidratos de carbono, se agota la insulina rápidamente.
Los síntomas habituales de la hipoglucemia son: mareo, sudoraciones, dolor de cabeza y confusión. Es importante que cualquier diabético sepa identificarlos para tomar glucosa rápidamente y poder evitarla.
Los diabéticos que dependen de la insulina deben aprender a disminuir y dosificar las dosis de insulina a la mitad antes de realizar ejercicio. Solo se debe llevar una dosis de glucosa encima o un vial cada vez que se sale a practicar ejercicio.
Aunque los diabéticos puedan hacer ejercicio con normalidad y beneficiarse de él, no deben empezar ningún tipo de entrenamiento sin haber consultado antes con su médico, haber pasado los controles pertinentes y haber tomado nota de las recomendaciones y precauciones a seguir.