Cada año, en esta misma época, comienzan los preparativos para las Fiestas. Para muchos es un tiempo de festejos y alegría, para reunirse con seres queridos y disfrutar. Por el contrario, algunas personas se sienten más estresadas, con ansiedad, tristeza o, incluso, depresión.
De acuerdo con un estudio realizado por el centro especializado en el control del estrés y la ansiedad Nascia en Madrid, España, el 44% de la población afirma que las fiestas de fin de año les producen un aumento generalizado del estrés. Entre las actividades que en esta época generan ansiedad encontramos: realizar las compras (76%), asistir a compromisos sociales (67%), tener excesos en los gastos (65%) y el cansancio general y la saturación de fin de año (60%).
Otra de las causas principales de depresión de fin de año es la frustración por no haber cumplido los objetivos durante el año, además de remordimientos por los errores cometidos y ansiedad por las nuevas resoluciones. Los especialistas señalan que esta clase de trastornos se manifiestan a través de angustia, pena, irritabilidad o alteraciones del sueño.
Otra situación que se agrava con la llegada de las fiestas es el consumo excesivo de bebidas alcohólicas, que aunque puede ser también un síntoma de depresión, puede camuflarse fácilmente en medio del alboroto de las reuniones familiares y sociales. También comer compulsivamente puede ser otra señal de alerta.
Los jóvenes y el suicidio
Otros estudios realizados por especialistas muestran que en estas fechas, los jóvenes tienden a deprimirse y toman al suicidio como una solución a sus conflictos, que suelen ser la falta de comunicación y problemas con sus padres, problemas amorosos, falta de aspiraciones y falta de recursos para las fiestas.
La falta de perspectivas de un futuro mejor los lleva a pensar que la vida carece de sentido y por este motivo, algunos deciden terminar con todo. Otros, que sufren por cuestiones amorosas, sufren en estas épocas un aumento en la sensación de soledad, se sienten abandonados o no queridos y eso también los impulsa a considerar al suicidio como una solución.
Cifras que asustan
Según la Organización Mundial de la Salud, cada año se suicidan casi un millón de personas, lo que supone una tasa de mortalidad “global” de 16 por 100 000, o una muerte cada 40 segundos. En los últimos 45 años, las tasas de suicidio han aumentado en un 60% a nivel mundial, convirtiéndose en una de las tres primeras causas de defunción entre las personas de 15 a 44 años en algunos países, y la segunda causa en el grupo de 10 a 24 años. Para colmo, estas cifras no incluyen los intentos de suicidio, que son hasta 20 veces más frecuentes que los casos de suicidio consumado.
Si usted se siente agobiado, triste y por su cabeza han pasado ideas de terminar con todo, no dude en buscar ayuda profesional y acercarse a la Universal, donde un pastor lo va a ayudar y orientar para que su vida pueda cambiar. Lo esperamos en cualquiera de nuestras direcciones para ayudarlo a superar los problemas que lo agobian y enseñarle el camino hacia una nueva vida.
Fin de año, tristeza para muchos
* Los recuerdos de fiestas pasadas con parejas, amigos o seres queridos que ya no están, que tienden a idealizarse.
* La soledad y el aislamiento. No contar con un grupo de seres queridos o amistades cercanas con quienes celebrar puede causar depresión.
* El fallecimiento de algún ser querido es una de las principales causas que lleva a transitar el fin de año con nostalgia o tristeza.
* Altas expectativas de tener una celebración “perfecta”, tal como la promocionan los avisos de televisión o gráficos. Esto crea un ideal difícil de alcanzar para la mayoría.
* La falta de dinero, la pérdida del trabajo y los problemas de salud también figuran entre las causas de depresión en estas fechas.
* La falta de expectativas para el año que comienza provoca depresión.
* La distancia geográfica. Vivir lejos de los seres queridos provoca tristeza, melancolía o depresión.
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