Usted ¿alguna vez pensó en el verdadero poder de la persona persuasiva? Este tipo de personalidad, por ejemplo, hace que el individuo tenga el poder de convencer de que su idea es más recomendable que la de los demás. “Esto puede suceder no sólo en una conversación, o en el ambiente de trabajo, sino también en actitudes tomadas diariamente, como convencer a un hermano o pariente de que la familia necesita de usted al frente de los negocios”, comenta la psicóloga Marina Penedo Gomes.
Según Marina, ser una persona afable es el primer paso para tener el poder de persuasión en las manos y saber usarlo positivamente cuando fuera necesario. “Generalmente, quien es persuasivo no habla sólo de los beneficios para si mismo, sino que presenta sugerencias que sean benéficas a todos los involucrados. Además, siempre muestra información relevante sobre el tema abordado”, comenta la psicóloga.
También señala que estas personas conocen con exactitud el punto débil de las personas implicadas, y utilizan esas deficiencias para conseguir lo que quieren. “Hay quien nació con esa capacidad, otros la fueron desarrollándola a lo largo de los años”, dice Marina. Es simple saber si alguien tiene realmente el poder de persuasión. Generalmente, esa persona logra interactuar de una manera distinta respecto a quienes le rodean y llega a ser carismática, por lo cual, no necesita esforzarse.
“Persuadir es una palabra que tiene fuerza. Quien obtiene ese poder raramente va a ponerse nervioso frente a una situación preocupante o de tensión. Esa persona siempre va a mantener la calma y va a conversar para resolver la situación de la forma más oportuna, asimismo se mostrará confiada de lo que está haciendo”, finaliza a especialista.