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La semana pasada, la reunión “Prosperidad con Dios” trató sobre el poder de la Palabra de Dios, la oración y la acción.
El poder del voto
El Altísimo creó todo mediante la palabra, y para Él, esta tiene mucho valor. Por eso, no hay que precipitarnos al hacer promesas, a no comprometernos con cosas que no estamos seguros de cumplir. Esto es muy serio, porque lo que el ser humano promete, será cobrado (lea Eclesiastés 5:1 y 2).
No hay mentira ni engaño en el cielo y no puede haber en el hogar, el trabajo, la empresa, el matrimonio, en la vida de quien es de Dios. Él valora mucho la palabra y quien cumple sus votos recibe respuesta de Él. Por otro lado, quien rompe su voto sale perjudicado, es derrotado por los enemigos, como le ocurrió a Sansón, por ejemplo. No estás obligado a nada, pero si prometiste orar, ora. Si prometiste ayunar, ayuna. O es mejor no prometer, porque Dios lo cobrará. Ten palabra y carácter en los más pequeños detalles delante de Dios y de los hombres.
El poder del perdón
“…Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí, y yo le perdonaré? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete”. Mateo 18:21-22
Todos nos enfrentamos a personas complicadas y somos complicados en algún momento, por eso debemos aprender a perdonar. Después de todo, necesitas ser perdonado por el Señor en todo momento, y sin eso no hay relación con Él. El perdón es tan maravilloso que empiezas a entender a las personas, te pones en su lugar.
El poder de la fe
Dios nos ha dado un arma poderosa: la fe. No tiene que ver con suerte o pensamiento positivo, sino que proviene del Padre, que es el Autor y Consumador de la fe sobrenatural, que nos hace alcanzar lo imposible.
Con la fe, vences y tomas posesión de todo antes de que suceda. Esto ocurre porque ves por fe, posees antes de que llegue. La fe te llena de una fuerza tan grande que nada en este mundo puede detenerte. Pero recuerda tener equilibrio: la fe te conecta a Dios para tener victorias, pero sobre todo para vivir eternamente con Él.
“Ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Hebreos 11:1
Aprende más:
No te pierdas la reunión “Prosperidad con Dios” que se lleva a cabo los lunes en el Templo de los Milagros. Los horarios son a las 8, 10 , 12, 16 y 20 h.