Algunas personas piensan que la felicidad es tener una familia perfecta, tener dinero o fama. Pero los bienestares de este mundo solo proporcionan una alegría momentánea. De ahí, surge la siguiente pregunta: ¿cómo ser verdaderamente feliz?
El secreto para alcanzar la felicidad es tener un espíritu de gratitud, sin importar las circunstancias. El que es agradecido, valora las cosas simples que Dios le da y que muchas personas subestiman, por ejemplo: el hecho de despertarse a la mañana.
Hoy en día, muchos descargan sus frustraciones en las redes sociales. Cualquier problema es motivo de quejas y murmuraciones. Las personas que no son agradecidas, aunque logren algún tipo de bienestar material, no encuentran nada bueno en sus vidas. Ellas no logran sentirse realizadas, y esto sucede porque la satisfacción no proviene de las cosas materiales. Al contrario, la satisfacción debe generarse en el interior de cada persona, independientemente de lo que posea.
Desarrolle este hábito
Si usted es agradecido con Dios, será feliz y eso se verá reflejado también en su ánimo. Haga la prueba y vea los resultados en su vida.