Este año son menos los CEO (directores generales de empresa) que creen que el crecimiento económico global mejorará, aunque la confianza en su capacidad para incrementar los ingresos de sus propias empresas permanece estable.
De acuerdo con la 18º Encuesta global anual de CEO, realizada por la firma PricewaterhouseCoopers International entre más de mil CEO, 300 presidentes ejecutivos, solo el 37 por ciento cree que el crecimiento económico mejorará en 2015, respecto al 44 por ciento registrado en 2014.
Es significativo que el 17 por ciento crea que el incremento económico global disminuirá más del doble que el año pasado. Mientras que el 44 por ciento restante espera que las condiciones permanezcan estables.
La encuesta muestra que en general los CEO adoptarán otras estrategias, como reducir sus costos.
El contexto internacional o macroeconómico puede asustar, sin embargo, quienes tienen una alianza con Dios verán el éxito en sus caminos, como está escrito: “Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; más a ti no llegará.”, (Salmos 91:7).
Para convertir a Dios en su Socio, usted necesita hacer un pacto de fidelidad y obediencia con Él. Piense, si Él está a su lado, ¿quién podrá hacerle frente?
Ellos no le prestaron atención a los pronósticos
Mauro y Marisol: “Yo llegué a la reunión de los días lunes con mi vida económica destruida. No se concretaba nada, llegamos a comer huesos para los perros porque mis padres estaban desempleados, estábamos en la miseria.
La situación cambió cuando comencé a participar de la reunión, mi mente se abrió, aprendía a usar mi fe. Pude tener mi propio negocio que crece cada día más, actualmente tengo dos negocios con empleados. Vi la crisis como una oportunidad para crecer y progresar y así fue”.
Ariel: “Estaba desempleado y eso me trajo como consecuencia deudas y tener que vivir de prestado. Era humillante la situación, me preguntaba cómo podía ser que teniendo formación académica no consiguiera trabajo. Un familiar vio mi situación y me invitó al Congreso, donde recibí una orientación para usar mi fe.
Así las puertas se abrieron, comencé a trabajar en una firma muy importante y fui saldando las deudas. Perseveré y mi vida cambió. Me casé, tengo mi auto y mi departamento”.
Priscila: “Antes de participar de la reunión de los días lunes mi vida económica estaba trabada. No tenía trabajo, para generar ingresos vendía ropa de manera ambulante en la calle, pero quería conquistar mi negocio. Solo que no podía lograrlo porque tenía deudas, ganaba muy poco y no podía cumplir con mis obligaciones. Comencé a usar la fe y las puertas comenzaron a abrirse, pude abrir mi negocio como lo quería. Ahora estoy trabajando y me va muy bien gracias a Dios. Mi vida está bendecida, pero voy por más”.
Congreso para el progreso, todos los lunes a las 8, 10, 16 y especialmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro
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