El que tiene el Espíritu Santo, irradia la luz que lleva en su interior hacia los que están a su alrededor y no hay manera de ocultarla.
“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.” Mateo 5:16
Debido al caos que predomina en el mundo, las personas se encuentran en la oscuridad, están cada vez más sedientas de paz. Aunque algunos intenten llenar el vacío que sienten con emociones momentáneas, al final del día, cuando todo se termina, la angustia y la incertidumbre prevalecen.
Por esta razón, el que posee la presencia de Dios, tiene la misión de llevarles luz y esperanza a los que viven en la oscuridad, y sus palabras no son transmisoras de negatividad ni de malas noticias. Incluso en medio del aislamiento, el que tiene esa luz, logra transmitírsela a sus familiares y vecinos.
Si usted tiene esa luz, ¡espárzala a su alrededor!
