La oración nos lleva a tener una intimidad con Dios muy profunda. Esta nos lleva a tener el pensamiento de Dios, a hablar como Dios y a tomar decisiones correctas en la vida. Cuando convivimos mucho con alguien, sin darnos cuenta pasamos a tener cualidades que la otra persona tiene: la forma de ser, de vestir, de caminar y hasta a tener las mismas reacciones en algunas ocasiones. La convivencia nos transfiere ciertos modales y eso hace la oración, nos transfiere los modales de Dios. (Daniel 6:4-11).
Daniel era el tipo de hombre que todos querían ser, tenía dinero, estaba al lado del rey, era inteligente y muchas otras cualidades más. ¡El secreto de su éxito estaba en la oración! Por más que él estuviera en un lugar destacado, más y más buscaba a Dios. Su fama y riqueza no lo alejaron de la oración, todo lo contrario, cuanto más alto estaba, más mostraba su dependencia a Dios a través de sus oraciones.
Cuando Intentaron derrotar a Daniel, lo atacaron donde él era más fuerte. El mal sabía que apartándolo de la oración podría destruirlo.
Pero en ese punto, Daniel, era más fuerte. La oración, nos da convivencia con Dios. Pero no es cualquier oración, debe separar un tiempo para hablar con Él, ser sincero y finalizar diciendo “sea hecha tu voluntad”.
Si ora cuando está al volante o mientras hace algo, significa que está en espíritu de oración. Hay una gran diferencia entre estar en espíritu de oración y la oración.
“Ya no dependo de las decisiones que toman los demás”
Enzo: “Antes de comenzar a hacer el Proyecto, dudaba mucho a la hora de tomar decisiones, me costaba definir lo que realmente quería.
Cuando me comentaron acerca del IntelliMen. Supe que era para mejorar como persona, me interesó y me propuse comenzar. Gracias a mi Socio que me apoyó a lo largo de los 53 desafíos, se me hizo más fácil terminar. Nos alentábamos el uno al otro, para seguir adelante.
Me ayudó a darme cuenta de lo que realmente quiero. Entonces, me propuse terminar el secundario y lo hice. Ahora no dependo de las decisiones o de lo que opinan de los demás para elegir lo que me conviene.
Mi familia notó el cambio. El Proyecto me ayudó mucho”.
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