INFIDELIDAD FÍSICA es cuando usted se entrega sexualmente a otra persona. Pero también existe la INFIDELIDAD EMOCIONAL, cuando usted deja que su corazón sea llevado por sentimientos y fantasías involucrando a otra persona. Usted le quita a su pareja lo que es solamente de ella y se lo da a otra persona.
Es por eso que Jesús alertó que solo mirar a una persona con deseo ya consiste en adulterio. Él sabía que todo adulterio físico comienza con el adulterio emocional. Entonces dio el consejo: “¡Ni piense en eso!”
La traición está regada de adrenalina. Pero la resaca es pura depresión y culpa. Mejor es que use su energía para establecer una relación en la que usted nunca necesitará buscar lo que necesita fuera de ella.
Extraído Blog Obispo Renato Cardoso
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