Aproximadamente un tercio de las mujeres sufren con Diabetes tipo 1, una enfermedad que hace con que el páncreas produzca poca o nada de insulina. Entre los síntomas más comunes está el aumento de hambre. Por eso, para huir del supuesto aumento de peso, muchas mujeres cometen actitudes extremas para adelgazar, como inducir el vómito. Después de todo, la sociedad- lamentablemente- impone, a través de la publicidad, por ejemplo, que la belleza está en las personas delgadas.
La joven británica Lisa Day era una de esas personas que querían seguir el “estándar de belleza”, pero superó los límites. Fue diagnosticada con diabetes tipo 1, en septiembre del 2001, cuando tenía 14 años. Su cuerpo no producía suficiente insulina así que, para mantenerse viva, tenía que inyectársela diariamente y cuidar su dieta. Pero, no lo logró porque quería solo adelgazar.
En septiembre del 2015, Lisa murió después de sufrir años con la enfermedad. En su diario, encontrado recientemente, ella describía sus tristezas, miedos y deseos, como el de usar un vestido rojo que ya no servía hace mucho tiempo. Ella se preocupaba más en adelgazar que en mantener regular el uso del medicamento. Debido a eso, desarrolló un problema estomacal y, cuando comía, su estómago ya no procesaba más los alimentos.
El peligro de los pensamientos compulsivos
La columnista Núbia Siqueira explica, en el blog de la escritora y conductora Cristiane Cardoso, que lamentablemente, en nombre de la belleza a cualquier costo, muchas mujeres ignoran el peligro, el sentido común y las recomendaciones al arriesgar sus vidas.
Ella incluso advierte: “Tal vez usted es una mujer que, al mirarse en el espejo, solo ve defectos. Quien sabe, quizás usted ya se tomó las medidas con la cinta métrica para ver si por lo menos está cerca de las medidas de las lindas mujeres de las revistas. Esas mujeres no viven una vida normal, están todo el día en el gimnasio, en la peluquería, haciendo tratamientos estéticos y con los dermatólogos, por lo tanto, no lavan la ropa, ni cocinan, ni estudian, ni llevan a sus hijos a la escuela, ni enfrentan filas en el supermercado, ni en bancos, etc.”
Cuando una persona conoce a Dios, ve todo a su alrededor de una manera diferente. Los ojos humanos dejan de estar presentes y le dan vista a los ojos espirituales, que fortalecen la fe y sirven de alimento para el espíritu. La belleza que realmente importa es la esencia, el carácter, si la persona hace el bien a su prójimo.
Según Núbia, la transformación debería ocurrir en lo que realmente promueve cambios verdaderos y duraderos en su vida, porque lo físico está en constante cambio, al contrario del espíritu fortalecido. Por eso, sea sabia. “Si se compara con otras mujeres no está viendo su propio valor”, finaliza.
¿Usted necesita liberarse de algún mal? ¿Algún familiar está sufriendo con algún trastorno? Participe en la Reunión de Liberación que se realiza todos los viernes a las 8, 10, 16 y 20h en las Universal de Almagro, Av. Corrientes 4070, o para encontrar la dirección de la iglesia más cercana a su casa ingrese aquí.
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