A través de la fe, el Señor abrió el canal de comunicación con la criatura. Estableció las leyes que rigen la fe, para que nadie la usara de forma equivocada.
Por la fe se conquista la Salvación eterna;
Por la fe se conquistan las Promesas de Dios;
Por la fe se vence al diablo, al mundo y a sí mismo;
Pero también por la fe se perdona y se es perdonado.
Dios es Perdón;
El perdón forma parte de Su carácter.
Quien quiera beneficiarse de la fe tiene que perdonar;
La comunión con el Altísimo depende del perdón.
La fe que da acceso al Trono de Dios exige que se perdone para ser perdonado.
“Porque si perdonáis a los hombres sus transgresiones, también vuestro Padre Celestial os perdonará a vosotros. Pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras transgresiones”. Mateo 6:14-15
La calidad de vida requerida por el cristiano depende de la calidad de fe que se practica.
La fe con calidad depende de la obediencia a la Palabra de Dios.
Sin perdón no hay fe de calidad,
Sin fe de calidad no hay calidad de vida.