Las deudas aumentan, se pierde el empleo y no se sabe cómo se podrá sostener a la familia, así una persona se desmorona lentamente. La situación financiera puede ser dramática, la economía puede estar estancada y la miseria avanzar, pero, al recurrir a Dios podemos levantarnos nuevamente. Nada de lo que nosotros vemos como invencible es más grande que Él.
Cuando Lo buscamos, aprendemos a establecer prioridades para conquistar todo lo que anhelamos.
Lo primero es su relación con Dios, luego, su matrimonio, a continuación, sus hijos y por último su trabajo. Todo lo realmente valioso no podemos obtenerlo sin Él. Dios nos da la paz, la tranquilidad y el equilibrio emocional para conquistar sin dejar de atender a nuestra familia, la salud y los compromisos.
Una relación con Dios nos da las condiciones de mantenernos firmes en tiempos buenos y malos. Siendo así, levante su cabeza, busque a Dios y comience a progresar con estabilidad.
En el Congreso para el Progreso tiene la oportunidad de capacitarse para conquistar. Lo esperamos este lunes a las 8, 10, 12, 16 y especialmente a las 20 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
El Congreso para el Progreso funciona
Nélida: “Estuve más de dos años desempleada, me daba mucha vergüenza. A la semana de participar en el Congreso conseguí trabajo, pude estudiar y hoy trabajo en el Poder Judicial, Dios me dio la visión de ir por más”.
Héctor: “Estuve desempleado durante un año, pasé por humillaciones. Yo empecé el Congreso y entendí la visión, estudié y me recibí. Ahora trabajo en Capital y en la provincia, tengo cuatro trabajos. Participando del Congreso para el Progreso, mi vida cambió”.
Cecilia: “Estuve cinco años desempleada, vivía de migajas en una pocilga. Empecé a participar del Congreso, me pude mudar y me ofrecieron un trabajo en la Municipalidad. Soy una mujer feliz, estoy sana y trabajando”.
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