Usted ya debe haber visto una película con el siguiente guion: los personajes consideraban normales todas las situaciones malas que les sucedían. Pensaban que todo no era más que una gran e infeliz coincidencia. Intentaban seguir sus rutinas normalmente, pero en el fondo sabían que había algo mayor y, por más que buscasen un sentido para sus vidas, siempre terminaban conformes con la realidad a su alrededor. Y se sorprendieron mucho cuando descubrieron que todo era una gran mentira, que estaban siendo engañados todo el tiempo. Aquel sufrimiento no era su destino, era todo planeado por alguien, el villano, que quería ver su mal y aprovecharse de sus emociones y decisiones equivocadas.
Solo que no es apenas un guion cinematográfico o de alguna novela donde esto ocurre. El mundo vive exactamente eso. Y el villano es alguien que nos conoce muy bien y trabaja incansablemente para destruir: el diablo. Él es el padre de la mentira, y engañar es su especialidad:
“Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.” Juan 8:44
La diferencia es que los villanos de las películas generalmente quieren lo que usted tiene, pero en el caso del diablo, él no quiere que usted tenga lo que un día él tuvo y perdió por orgullo.
No se engañe
Incluso sabiendo la gran mentira en la que el mundo está sumergido, no son pocas las personas que insisten en creer en esa ilusión. Viven presas en sus traumas, vicios, enfermedades, emociones, complejos, porque no se dan la oportunidad de conocer a Quien las puede liberar:
“Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” Juan 8:32
Y la verdad es el propio Señor Jesús:
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por Mí.” Juan 14:6
Conocer al Señor Jesús es conocer a quien el diablo no quiere que las personas conozcan, pues sabe que Él es el Único que puede arrancarlas de toda la mentira que él ha creado en el mundo.
Y no se engañe creyendo que solamente los que todavía no tuvieron un encuentro con Dios son el objetivo del diablo. El Señor Jesús nos advirtió que, para que no conquisten la salvación,él hará de todo para engañar a los escogidos (Mateo 24:24).
Por eso, esté atento y no base su vida en lo que el mundo dice que es correcto. Solo hay una manera de vivir una vida abundante, tener paz y, la Eternidad, la Salvación del alma: conociendo y haciendo la voluntad de Dios:
“Y no os adaptéis a este mundo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente, para que verifiquéis cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, aceptable y perfecto.” Romanos 12:2
Cuanto más usted se acerca a Dios, más distante estará de todo el engaño de este mundo. Pero es necesario que los que se acercan a Él lo hagan con fe, sin la cual es imposible agradarlo.
Todas los miércoles y domingos se realizan en la Universal reuniones especiales con el propósito de llevar a las personas a conocer la verdad que libera. Participe en la iglesia más cercana.
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