Elisa: “Empecé la Cadena por el papá de mi nieta. Después de que ella nació, él ya no tenía ganas de trabajar. Por eso, empecé a hacer las cadenas y fue de a poco, no fue fácil.
Al principio, hacía changas, pero luché en los Casos Imposibles, primero cambió su carácter. Después consiguió un trabajo. Hoy estoy feliz, porque gracias a Dios a ellos no les falta nada”.
“Estuve cinco meses postrada”
Juana llegó a la reunión de los Casos Imposibles con la salud deteriorada, pero a través de la fe, logró sanarse: “Yo vine por mi salud, tenía cinco vértebras sobresalidas. Estuve cinco meses postrada.
Pero viniendo a los Casos Imposibles, luché por mi salud y logré volver a caminar. Gracias a Dios, ahora me siento bien, ya no tengo dolor, estoy totalmente sana”.
“Hay prosperidad en nuestra casa”
“Nosotros teníamos un local alquilado. El inquilino tenía empleados y uno de ellos nos hizo juicio, aunque no teníamos nada que ver. Iban a rematarnos la casa. Ningún abogado nos quería agarrar el caso.
Vinimos a los Casos Imposibles y en menos de un mes tuvimos una audiencia con el juez. No pagamos nada, el inquilino se terminó yendo y ahora hay prosperidad en nuestra casa”.
La Iglesia Universal del Reino de Dios aclara que todos los conceptos emitidos en este periódico, como en su programación radial y televisiva, en modo alguno deben ser interpretados en desmedro de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJE DE CONSULTAR A SU MÉDICO.
Si usted tiene un imposible en su vida o en la de algún ser querido, acérquese a participar de la reunión de los Casos Imposibles este sábado a las 7, 9, 20 y especialmente a las 15 h en Av. Corrientes 4070, Almagro.
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